La Flor de Pascua, también conocida como Flor de Nochebuena, poinsettia o pascuero, es una de esas cosas que cada vuelve a casa por Navidad igual que el turrón. Una planta que, con sus pétalos rojos y verdes se ha convertido en el verdadero icono de estas fiestas porque florece precisamente en estas fechas. Pero también porque solamente dura en esta época. Llegado enero, empieza a perder sus hojas, por lo que rara vez sobrevive a la Navidad.

Pero eso es porque no la conocemos bien. La invitamos a nuestros hogares pero no siempre sabemos cómo cuidar una Flor de Pascua para que dure más tiempo. ¿Quieres saber cuáles son los cuidados que necesita una poinsettia? Solamente tienes que acercarte un poco a ella para entenderla. Recuerda que, aunque muchas veces la tratemos así, no es un adorno navideño más, sino que es un ser vivo que puede llegar a convertirse en una planta grande y frondosa si la dejamos crecer y quedarse con nosotros más allá de las fiestas.

 

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Características de la Flor de Pascua

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Lo primero que debes saber que la Flor de Pascua es originaria de México, por lo que necesitan un clima templado y estable, sin heladas ni cambios bruscos de temperatura. Por lo general, las tenemos en el interior de la casa pero debes saber que su hábitat más adecuado es el exterior, ya que necesitan mucha luz, especialmente en su etapa de floración. Si se respetan estas condiciones, la planta no solamente se mantendrá viva, sino que además puede llegar a convertirse en un gran arbusto de 5 metros de altura.

Normalmente, sus hojas se vuelven rojas en diciembre, pero también pueden ser de color amarillo, blanco o, incluso, rosa. Y, aunque muchos creen que sus hojas son los pétalos de sus flores, lo cierto es que son brácteas cuya misión no es llevar a cabo el proceso de la fotosíntesis, sino proteger las flores reales. Esas flores pequeñas y amarillas que se encuentran en el centro, igual que ocurre con las buganvillas.

 

 

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¿Qué cuidados necesita la Flor de Pascua durante la Navidad?

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Como ya hemos dicho, las poinsettias son plantas de exterior. Sin embargo, esto no significa que no pueden crecer y mantenerse en perfectas condiciones en el interior de la casa. Lo único que debemos tener en cuenta son los cuidados que necesita. Es verdad que son plantas delicadas pero merece la pena cuidarlas.

Hay que tener en cuenta que son plantas originarias de climas cálidos por lo que cuando la introducimos en nuestro hábitat, tiene que intentar sobrevivir en un clima adverso. Solamente tenemos que ayudarlas un poco para conseguir que sobrevivan a la Navidad y nos duren todo el año para que podamos volver a deleitarnos con ellas al año siguiente. Con un poco de cariño, volverán a florecer y a llenar nuestra casa de alegría y de auténtico espíritu navideño.

 

 

Al comprar tu Flor de Pascua

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• Debes saber que a los pascueros no les gustan los cambios de temperatura muy bruscos. Con lo cual, si vas a tenerla en el interior de tu casa, es mejor comprar la Flor de Pascua en un comercio donde la tengan ya en el interior.

 

• Por lo general, en la floristería suelen envolverla con un plástico para que las bajas temperaturas del invierno no la perjudiquen durante el trayecto a casa. Piensa que son plantas bastante delicadas y que, aunque el trayecto no sea muy largo, el frío puede ser suficiente para comprometer su supervivencia.

• Asegúrate de que no haya tallos rotos o podridos ni manchas en las hojas, ya que estos son síntomas de que la planta no goza de buena salud y no durará mucho tiempo en casa.

• Mira bien que no haya muchas florecillas abiertas, ya que esto quiere decir que el tiempo de vida de sus brácteas será mucho menor.

• El tronco de la planta debe estar firme, por lo que también debes inspeccionar la base. Muévelo un poco y asegúrate de que no está suelto y de que está bien adherido a la tierra.

 

 

Cuidados generales de la Flor de Pascua

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Luz

 

Recuerda que la Flor de Pascua necesita mucha luz natural. Si la colocas en un lugar oscuro, las hojas terminarán cayéndose. No obstante, nunca deben recibir los rayos del sol directamente.

 

 

Temperatura

 

Tanto el frío como el calor hacen que estas plantas pierdan sus hojas. Para que se mantengan perfectas, la temperatura ideal es de 22 ºC durante el día y de 16 ºC durante la noche. Por eso, no es conveniente que jamás esté a más de 25 ºC ni a menos de 10 ºC si queires que tu Flor de Pascua dure más tiempo.

Además, los pascueros odian las corrientes de aire, por lo que es preferible que los pongas en un rincón apartado donde no haya puertas ni ventanas que puedan crearlas.

 

 

Humedad

 

También detestan la calefacción, que suele ser bastante habitual en estas fechas para calentar los hogares. Los aparatos de aire acondicionado y las chimeneas resecan mucho el el aire y estas plantas necesitan humedad ambiental, por lo que las hojas se caerán. Así pues, si vas a tener la calefacción puesta, ponla lo más alejada posible del punto de calor para que no lo reciba directamente.

Además, te aconsejamos que les pongas un cuenco en la base de la maceta con piedras y agua para que la base y las raíces no estén en contacto directo con el agua. Esto les proporcionará la humedad que necesitan para combatir la sequedad del ambiente cuando esté puesta la calefacción.

En el caso de que la calefacción esté muy alta y/o esté puesta constantemente, un truco es pulverizar las hojas verdes. Eso sí, solamente las hojas verdes, no las brácteas, ya que se mancharán y perderán su bonito color rojo. Y solamente en aquellos casos en los que el ambiente sea seco. De lo contrario, podrían contraer hongos.

Por otra parte, debes saber que el ambiente no solamente debe ser húmedo, sino que también debe ser limpio. Si el aire no es de calidad, lo más probable es que sus hojas no tarden mucho en empezar a secarse y a arrugarse.

 

 

Riego

 

A la hora de regar las poinsettias, lo mejor es hacerlo por el método de inmersión. Consiste en poner la planta dentro de un cuenco con agua a temperatura ambiente y dejarla 15 mintos. Después retiraremos el agua que no haya absorbido. Recuerda que nunca deben mojarse las hojas ni las flores.

Es muy importante que antes de volverla a regarla, te asegures de que la tierra se ha secado, ya que el exceso de agua puede terminar pudriendo la raíz. Pero tan malo es el exceso como la carencia. Si la planta no recibe agua suficiente, también terminará muriendo. Si ves que las hojas empiezan a amarillear, especialmente en los bordes, quiere decir que necesita más agua. Las necesidades de riego variarán en función del ambiente, aunque lo normal es que necesite un par de riegos a la semana como máximo.

 

 

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¿Cómo cuidar la Flor de Pascua después de Navidad?

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A finales de enero, lo normal es que las hojas verdes y rojas se hayan caído. No debes asustarte, ya que forma parte de la vida de la planta. Las brácteas que protegen las flores desaparecerán, ya que sin las flores no las necesita. Esto no quiere decir que la planta se esté muriendo y que debas tirarla, solamente debes seguir cuidándola.

Los cuidados de temperatura, humedad y riego serán prácticamente los mismos, con la única excepción de que en invierno y primavera necesitarán más luz que en otoño en verano y otoño.

 

 

Abono

 

 

Una vez que la floración ha terminado, la Flor de Pascua necesita que le añadamos fertilizante líquido, ya sea universal o de lenta liberación. Una frecuencia de una vez cada diez días es más que suficiente. No obstante, es fundamental que sigas las indicaciones del fabricante.

 

 

Poda

 

 

En algunas casas, solamente teniendo en cuenta los cuidados generales, las hojas verdes se mantienen incluso durante meses. En cualquier caso, lo más recomendable es podarla cuando se haya quedado sin hojas.

Para ello, se deben cortar los tallos, dejándolos a una altura de unos 10 cm aproximadamente. Es aconsejable usar guantes, ya que la savia contiene una sustancia que resulta muyirritante para las mucosas y para la piel. Una vez que los hayas cortado, sella el extremo con cera derretida de vela.

 

 

Primer transplante

 

 

Cuando se hayan caído las hojas, lo ideal es trasplantarla al jardín si tienes uno. Eso sí, si vives en una ciudad en la que las heladas son habituales, es preferible que la dejes en el interior teniendo en cuenta los cuidados que hemos ido explicando hasta la primavera. En el caso de que puedas transplantarla al jardín, procura colocarla bajo un farolillo donde permanezca iluminada toda la noche. De esta forma estarás alargando el día de manera artificial y será más fácil que florezcan cuando llegue el mes de diciembre.

 

 

Reposo de la Flor de Pascua

 

 

Una vez que hayamos fertilizado, podado y trasplantado nuestra poinsettia, la dejaremos en reposo durante el resto del invierno, a ser posible, en un lugar donde no la calefacción no le afecte. Además, recuerda que, aunque esté en reposo, sigue necesitando riego. Eso sí, en lugar de dos veces como en Navidad, solamente lo haremos una vez a la semana.

 

 

Trasplante cuando llegue la primavera

 

 

Al llegar la primavera, pasaremos nuestra Flor de Pascua a una maceta de mayor tamaño, poniendo en el interior una mezcla de sustrato universal, una parte de arena y una parte de hummus o turba. En estso meses, necesitará además una buena iluminación natural y una temperatura media de unos 20 ºC. Si seguimos estas indicaciones, nuestro pascuero empezará a dar nuevos vástagos que se desarrollarán y empezarán a foliar durante los meses de verano y otoño. Para ello, lo ideal es, además de seguir regándola cuando veamos que la tierra esté seca, añadir un poco de fertilizante de vez en cuando.

 

 

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Etapa de floración

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Para que la planta vuelva a florecer en diciembre, también necesita estar entre 12 y 14 horas al día entre finales de septiembre y principios de octubre en un lugar donde la oscuridad sea total durante la tarde-noche. Si no tenemos ninguna habitación así, podemos crear la oscuridad de manera artificial tapándola con un plástico oscuro, con una campana protectora recubierta con aluminio o con un cartón grueso.

De lo contrario, tu Flor de Pascua crecerá, pero no florecerá. Tendremos una bonita planta de hojas verdes, pero no rojas. Si has seguido estos consejos, tus pascueros volverán a florecer en diciembre, ás grande que el año anterior y llena de de brillantes hojas de color rojo.

Además, si quieres que tome esa forma compacta tan bonita que tienen cuando las compramos, puedes aplicar reguladores de crecimiento, que ayudan a frenar su desarrollo por vía foliar.

También es muy importante que se abone durante la época de floración para que sea adecuada y nos deleite con toda su belleza. Lo ideal es usar fertilizante líquido y añadirlo en el agua del riego cada dos semanas. Gracias a ello, cogerá más fuerza y el colorido será más bonito.

Por otro lado, recuerda que la Flor de Pascua es una planta bastante delicada, por lo que es importante que se coloque en un lugar donde no pueda ser rozada o golpeada si no quieres que termine rompiéndose.

 

 

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Ahora que ya sabes cómo cuidar la Flor de Pascua para que dure más tiempo más allá de la Navidad, seguro que consigues que el próximo año tus plantas estén preciosas para adornar tu casa durante las fiestas.

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